martes, 25 de marzo de 2014

Madre asegura que aceite de marihuana curó hija epiléptica

La pequeña Charlotte, de 5 años, sufría de unas 300 convulsiones a la semana

























Nueva York – En momento en que el tema de la marihuana medicinal está en su apogeo en Estados Unidos, un nuevo caso que envuelve a un niña que sufre de epilepsia, ha venido a darle más bríos al movimiento que defiende las bondades curativas que tiene la hierba.
La madre de Charlotte, una pequeña de 5 años, revolucionó este martes las redes sociales al contar cómo su hija supuestamente se curó de las convulsiones que trastornaban su corta existencia, gracias al uso de la marihuana medicinal que se vende en los negocios de Colorado.

POR VALERIE SANTOS

viernes, 21 de marzo de 2014

El año de la biotecnología, en una aplicación para móviles

La Asociación Española de Bioempresas (Asebio) ha puesto en marcha la aplicación “InvestBio” que recoge un calendario digital con 365 proyectos biotecnológicos innovadores vinculados cada día a una conmemoración o efeméride.

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lunes, 17 de marzo de 2014

Científicos de EE.UU. descubren un microbio que se alimenta de electricidad




















Científicos de Harvard han descubierto una bacteria que sobrevive con la dieta más extraña para un ser vivo, ya que subsiste alimentándose únicamente de electricidad.

Investigadores de Harvard encabezados por Peter Guirguis han publicado un estudio en la revista 'Nature Communications' en el que sostienen que una bacteria común, la Rhodopseudomonas palustris, puede usar la conductividad natural para extraer a distancia electrones de los minerales del subsuelo, mientras ella misma permanece en la superficie absorbiendo la luz de Sol necesaria para producir energía.

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POR ADOLFO JIMÉNEZ



viernes, 14 de marzo de 2014

Descubren que el aceite de semillas del ‘cannabis’ es beneficioso para la salud

El grupo de investigación Plantas Medicinales de la Universidad de Sevilla, liderado por la catedrática de Farmacología Dolores García, ha descubierto que el aceite procedente de la semilla de cáñamo posee componentes potencialmente beneficiosos para el organismo.

En el último número del Journal of Agricultural and Food Chemistry, estos expertos han publicado un artículo científico en el que describen en profundidad la composición química de este aceite, destacando la presencia de ácidos grasos poliinsaturados, así como la de otros componentes menores, potencialmente bioactivos y una total ausencia de cannabinoides y por lo tanto de efectos estupefacientes a pesar de extraerse del ‘cannabis’.

“Este es el primer trabajo que publicamos en esta nueva línea de investigación pero nuestro siguiente paso será mostrar los resultados del efecto de una dieta suplementada con aceite de cáñamo en un modelo experimental de fibromialgia en ratones, en donde se observa como esta dieta disminuye la sensibilidad al dolor, mejora el componente inflamatorio y revierte  otros síntomas asociados a este síndrome” informa la profesora del Departamento de Farmacología de la Universidad de Sevilla, María Ángeles Fernández Arche.

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lunes, 10 de marzo de 2014

Una terapia génica ayuda a reducir la infección por VIH

La modificación elimina la puerta de entrada del virus en las células que intenta infectar
Una terapia de choque libra a otro bebé del VIH e impulsa un ensayo
Hasta la fecha, todas las terapias contra el VIH se han basado en atacar al virus. Los variados fármacos —que por eso se toman combinados— actúan en las distintas fases de un complejo ciclo que empieza porque este se pega a células diana (los linfocitos del sistema inmunitario), les abre la membrana y les inyecta su material genético. La terapia génica cambia el enfoque: en vez de intentar bloquear la llave (las proteínas del virus), consiste en modificar los leucocitos para que no tengan la cerradura (lo que en lenguaje técnico se llama el receptor CCR5).

El ensayo, que se ha presentado en la Conferencia sobre Retrovirus y Enfermedades Oportunistas (CROI) de San Francisco, y se ha publicado en New England Journal of Medicine, utiliza uno de los más prometedores hallazgos en terapia génica: los llamados dedos de zinc, una especie de tijeras que permiten escoger con absoluta precisión qué parte del ADN se manipula.

En concreto, lo que se ha hecho ha sido tomar los linfocitos-T (los famosos CD4 que son el indicador del avance de la infección) de personas infectadas por el virus, y se les ha extirpado el gen que codifica la proteína CCR5 de su superficie. Con esto se elimina la cerradura a la que debe adaptarse la llave del virus para abrirlos e infectarlos. Luego, se los ha cultivado para hacerlos proliferar, y se han reinyectado a los voluntarios, donde la infección ha seguido su curso.

El resultado ha sido que con el transcurrir del tiempo, el virus ha ido destruyendo los CD4 normales, pero no ha podido actuar contra los manipulados. Como el VIH no es capaz de replicarse si no es pasando por la fase intracelular, la que tiene lugar dentro de los linfocitos, la concentración de este ha ido bajando. Con anterioridad ya se había visto que estos linfocitos modificados, que los científicos han llamado SB-728-T, eran bien tolerados en los pacientes.

En los ensayos se han utilizado células de pacientes en diversa situación: personas tratadas con antivirales que tenían una buena respuesta a la medicación o alguno que, pese a seguir el régimen farmacológico, no conseguían controlar la presencia de virus en su sangre.
Pero, además, los investigadores han encontrado un aliado para ayudar a la proliferación de estas células especialmente protegidas. Se trata de un anticanceroso, la ciclofosfamida. Al tratar a los voluntarios (12 en el ensayo) con distintas cantidades de este fármaco antes de reinyectarles los linfocitos bloqueados, se vio que estos se expandían con más facilidad. De hecho, su cantidad aumentaba directamente cuanto mayor hubiera sido la dosis de ciclofosfamida utilizada.

Los científicos, dirigidos por Gary Blick, del Circle Care Center de Connecticut, creen que ello se debe a que el pretratamiento con el antitumoral destruye los CD-4 normales, lo que deja espacio para que se propaguen los mutados, que, al estar modificados, competirían peor por el espacio natural (sería como eliminar a guepardos rápidos de la sabana para que tengan más oportunidades de éxito otros más lentos). Las cifras de CD-4 que se alcanzaron en los mejores casos, 1.500 unidades por mililitro de sangre, exceden incluso la habitual en personas sanas, ya que estas suele rondar las 1.000 copias.


jueves, 6 de marzo de 2014

La aventura de Doñana

Doñana era un joven condenado a muerte; ahora es una persona mayor, pero indultada, dice Miguel Delibes de Castro, exdirector de la estación biológica



Refugio de mandatarios y personalidades de todo el mundo, enclave de especies en peligro tan emblemáticas como el lince ibérico y el águila imperial
El parque nacional cumple medio siglo como reserva biológica
Este es un viaje a sus secretos a través de quienes mejor lo conocen

En una choza hecha de madera y junco en la veta de Las Carabiruelas, en medio de la marisma de Doñana, donde reinaron siempre el paludismo y los señoritos, nació José Boixo un 30 de septiembre de 1935, diez meses antes del inicio de la Guerra Civil. Doñana era entonces uno de los cotos de caza más grandes de España, un lugar aislado en la margen derecha del Guadalquivir donde aristócratas y reyes iban a matar venados, jabalíes, patos, linces, zorros y otras alimañas, también Alfonso XIII, que durante catorce años fue cada invierno de montería antes de refugiarse en Roma.

En aquel tiempo, Doñana era virgen y salvaje y solo había pasado por manos de unas pocas familias. Durante seis siglos, el coto perteneció a los duques de Medina Sidonia, hasta que en 1900 Guillermo Garvey lo compró por 150.000 duros y más tarde lo recibieron en herencia los duques de Tarifa. En 1935, tras la muerte de estos, los marqueses de Borghetto obtuvieron la propiedad de las 27.000 hectáreas en pago de una deuda, y más o menos por aquellos días el padre de Boixo se mudó del Coto del Rey a la marisma de Hinojos a cuidar las reses de unos ganaderos de Villamanrique de la Condesa.
La marisma era un territorio inhóspito que ni siquiera los ingleses habían logrado domar, pese a que trataron de cultivar algodón y arroz en los años veinte sin éxito. Solo había por estas tierras unos cientos de carboneros, mieleros, piñeros, salineros, leñadores, aparceros, arrieros y –los dos oficios más deseados– guardas y caseros de los palacios de Doñana y de las Marismillas.

“La vida aquí era muy dura… muy dura”, recuerda Boixo ante uno de los alcornoques centenarios del coto, hoy parte de un espacio natural protegido que se ha ido ampliando hasta 108.000 hectáreas, del que son su corazón la estación biológica y el parque nacional de Doñana, declarado reserva de la biosfera y patrimonio de la humanidad por la Unesco.